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En la previa del Rally de Rocha, Gabriel Beltrán compartió sus sensaciones y no ocultó la crudeza del momento que atraviesa hace un par de años: “Piriápolis nos dio una cachetada grande. No pudimos ni terminar el primer tramo porque el motor tragó agua y se nos rompió. Tuvimos que poner uno nuevo", expresó.

 

El experimentado piloto, que cumple 25 años en la disciplina, también habló de las dificultades fuera de la pista: “Se nos complicó bastante la parte económica, trabajamos mucho para llegar a esta fecha. Deportivamente tenemos buenas sensaciones pero no sabemos dónde estamos parados porque anduvimos muy poco con el auto”.

 

A pesar de los contratiempos, Beltrán mantiene intacta la pasión: “Sigo con las mismas ganas de siempre. Estamos deseando que de una buena vez por todas aparezcan los resultados porque últimamente venimos muy golpeados. No soy resultadista, pero da ánimo".

 

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