Entrevista a Pablo Peón:

-"Ya tenía una relación previa con Estados Unidos. Cuando era joven, mi padre me dio la oportunidad de estudiar en una universidad en las afueras de Chicago. Estuve cinco años y siempre quise volver".

-"Ahora estoy completamente alejado del automovilismo oficial dirigencial. Obviamente que me siguen gustando los autos, hasta he vuelto a correr. Algo que en Argentina no podía hacer porque era dirigente, no quedaba bien".

-"El TC2000 tuvo un gran problema en 2001 por la crisis en Argentina. Hubo un conflicto interno bastante grande. Se dio una asamblea, empezaron a renunciar y yo quedé a cargo. No tenía ni ganas ni idea pero era solo por tres meses. Después fueron 14 años".

-"La persona al frente de una categoría no puede tener conflictos de intereses. El TC2000 de aquella época parecía profesional pero bastante amateur por cómo se gestionaba. Necesitaba otro tipo de organización".

-"No puedo hablar de mi gestión. El balance de aciertos y errores lo hacen los demás. Lo único que sé es que trabajé mucho y le di mucho tiempo. Cuando vi que ya no tenía tantas ganas, avisé que me iba a ir. Quería cambiar de vida".

-"Uno aprende más de los errores que de los aciertos. Me sirvieron. No me arrepiento, no tengo nada que no volvería a hacer".

-"Veía viejo al automovilismo, como que siempre era lo mismo. Me acuerdo cuando hablé del callejero nocturno de Santa Fe o el circuito por la 9 de julio. Me miraban como si hubiera tomado algo".

-"Sin dudas que el automovilismo se va a recuperar pero los dirigentes deben entender que esta crisis es única y el impacto va a ser fuerte. Tienen que armar un plan común, ser generosos y perder los egos. Deben trabajar en equipo para salvar la actividad".